CANELLA, A UN PARTIDO DE LOS 200 CON LA CAMISETA DEL SPORTING

Canella en el Molinon hoy en el entrenamiento

“Descansa un poco, chaval”, le dijo Manolo Preciado con su voz ronca en los arenales de San Lorenzo, donde el Sporting realizaba una exigente jornada de entrenamiento en la pretemporada 2006-2007. “Un poco cargado, míster, pero no cansado, estoy bien”, le respondió Róber Canella con una timidez que sólo los años han logrado ir limando. Tenía 18, uno menos que la mayoría de sus compañeros de la Selección Española Sub 19 con la que venía de conquistar en Polonia el cetro europeo. 

 

Zurdo, de Pola de Laviana y pulido en Mareo, quedaba incorporado al primer equipo. Había jugado 421 minutos en los cinco encuentros con los que la incipiente Selección se había mostrado como la mejor del continente. Llegaba entonces al primer equipo rojiblanco tras haber escalado toda la pirámide competitiva de la escuela de fútbol rojiblanca, a la que arribó Cuenca del Nalón abajo tras su etapa de alevín de primer año en el Alcava de Laviana, donde actuaba de medio centro. Luego jugó de extremo, ya en los alevines sportinguistas y hasta el Sporting B. En el segundo equipo gijonés iría retrasando su posición hasta posar, como los buenos vinos, en el puesto de lateral. 

 

Desde cuando alcanzó el primer equipo rojiblanco, desde el día en que el desaparecido técnico de Astillero le hizo debutar, ante el Tenerife, en el Heliodoro (0-4), en sustitución de Jony López, ha disputado un total de 199 partidos oficiales en el fútbol profesional. Si Sandoval cuenta con él este próximo domingo ante el Sabadell (17 horas), como así ha sido siempre que lo ha tenido a su disposición, alcanzará los 200, siempre en el Sporting: 100 en Primera División, 97 (9 esta campaña) en Segunda y 2 en Copa del Rey. 

 

Internacional en las categorías inferiores, oro en dos draft y, pese a sus 24 años, un veterano... Titular siempre que le respetaron las lesiones, la pasada campaña disputó 35 partidos. Su media está por encima de los 30 por temporada.

 

Desde aquella mañana de finales de julio de 2006 y este otoño de 2013 han pasado muchas cosas; en el caso de Canella, esos “casi” 200 partidos oficiales como parte de una fértil y sólida carrera profesional.

“Para mí es un inmenso placer llegar a los 200 partidos en el equipo de toda mi vida y me considero un privilegiado por ello”, respondió Canella cuando le preguntaron por la efeméride futbolística.

 

“Ahora en el fútbol es muy difícil alcanzar cifras muy altas de continuidad en un club, pero yo estaría encantado de que todo siguiera así”, concluyó el jugador rojiblanco