LORA NO DILATARA SU DECISION SOBRE LA RENOVACION

Lora lucha un balón con Cristiano Ronaldo

Alberto Lora no tiene intención alguna de demorar su decisión sobre si acepta o no la oferta de renovación que desde hace unos días trasladó Alfredo García Amado, director general del Sporting, a su agente Iñaki Espizua. Una propuesta que contempla renovar al mostoleño por tres temporadas, concretamente hasta el 30 de junio de 2017, con diferentes claúsulas económicas en función de la categoría en la que milite la entidad rojiblanca y el rendimiento del polivalente futbolista. 

Lora, que finaliza contrato a finales de junio del año entrante, ha despertado el interés de algún equipo de Primera División y cuenta con ofrecimientos para incorporarse a sus filas, pero su prioridad primordial es el Sporting y una vez que pasen estas fechas de Navidad su intención pasa por estudiar con detenimiento junto a su agente Iñaki Espizua la propuesta gijonesa y tomar una decisión definitiva que muy probablemente comunicará a lo largo del primer mes de 2014. 

Más allá del montante económico total de las ofertas que pueda manejar Alberto Lora, el futbolista madrileño, según su representante, valorará especialmente que el proyecto deportivo que se le ofrezca presente garantías de futuro. Algo que parece lógico ya que el mostoleño firmará el año que viene el que se presume que pueda ser un contrato clave en su trayectoria profesional ya que no en vano el próximo marzo cumplirá veintisiete años. Es de suponer pues que en la oferta rojiblanca, el madrileño desee la inclusión de alguna claúsula en la que se contemple alguna variable referente a que si el Sporting lograra ascender a Primera y descendiera de nuevo, la entidad gijonesa se comprometerá a hacer lo posible por encontrarle una salida hacia una superior categoría. 

La baza del Sporting respecto al resto de ofertas que pueda manejar Lora parece radicar en que aquí es un futbolista consagrado con una trayectoria que le avala, mientras que si da el paso a marcharse tendría que partir de cero a todos los efectos con lo que eso supone por mucho que te avale una estadística de partidos disputados en Primera y Segunda División.